En Estados Unidos se están desarrollando dispositivos no tripulados únicos que son indistinguibles de las aves: patos y palomas, informa el New York Post. Estos drones se basan en pájaros reales disecados, lo que permite que los dispositivos se mezclen con la naturaleza y observen silenciosamente la vida silvestre. El proyecto proviene de científicos del Instituto de Tecnología de Nuevo México, donde están adoptando un enfoque para crear drones que combinen forma natural y mecánica.
Según un profesor asociado de ingeniería mecánica del instituto, los drones que imitan a las aves se desarrollan teniendo en cuenta la fisiología de los seres vivos, lo que hace que su vuelo sea lo más parecido posible a los naturales. Los ingenieros utilizan mecanismos que reproducen los movimientos de las alas y las maniobras características en el aire, dando a los drones el realismo necesario para operar en entornos naturales.
Al mismo tiempo, estos vehículos aéreos no tripulados también pueden utilizarse con fines militares, por ejemplo para la vigilancia constante de instalaciones militares, lo que constituye una preocupación muy grave.