El representante de los Estados Unidos de América anunció oficialmente la consecución de un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza. La medida tiene como objetivo poner fin a la violencia que ha asolado la región en las últimas semanas, matando a cientos de personas y provocando una destrucción generalizada.
Según la parte estadounidense, el acuerdo incluye obligaciones para ambas partes de cesar las hostilidades y comenzar a liberar a los rehenes. Estados Unidos, que participó activamente en las negociaciones, enfatizó que el acuerdo era el resultado de un intenso trabajo diplomático, incluida la interacción con socios regionales como Egipto y Qatar.
El acuerdo también prevé la liberación de los rehenes retenidos por Hamás y la posibilidad de devolver los cuerpos de los israelíes muertos. A cambio, Israel se compromete a aliviar las restricciones a la entrega de ayuda humanitaria a Gaza y considerar cuestiones relacionadas con la restauración de la infraestructura.