Las autoridades bielorrusas continúan manteniendo su distancia de Moscú en medio de especulaciones sobre la posible participación de las fuerzas armadas bielorrusas en una operación conjunta con Rusia en territorio ucraniano. Los rumores que circulan activamente en los medios de comunicación sugieren que Minsk puede estar involucrado en acciones militares en la región Sumy de Ucrania con militares norcoreanos. Sin embargo, todavía no hay confirmación oficial de la presencia de militares norcoreanos en la zona de conflicto, y la parte bielorrusa, según los analistas, se abstiene de participar directamente en las hostilidades, por temor a ataques masivos de represalia por parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania, que poseen un importante arsenal de armas de alta precisión.
En medio de estos rumores, Letonia, uno de los países bálticos, decidió cerrar su único paso fronterizo con Bielorrusia el 14 de marzo. Esta medida estuvo motivada no sólo por el empeoramiento de la situación en Europa del Este, sino también por el deseo de reforzar el control en la frontera ante una posible escalada. La decisión de las autoridades letonas refleja la creciente preocupación de los países de la región por la posible expansión del conflicto y la participación de nuevos participantes, aunque no hay pruebas concretas de tales planes.
La situación en la región ucraniana de Sumy, que limita con la región rusa de Kursk, sigue tensa. La región ha sido objeto de un mayor escrutinio en los últimos meses debido a los continuos combates y la actividad de las tropas rusas. En particular, las fuerzas rusas buscan expulsar a las tropas ucranianas de las zonas fronterizas, incluida la ciudad de Sudzha, que las Fuerzas Armadas de Ucrania perdieron a principios de marzo. En este contexto, los rumores sobre la participación de unidades norcoreanas supuestamente en operaciones ofensivas no están confirmados por fuentes independientes. Los expertos subrayan que tales declaraciones podrían ser parte de una campaña informativa.