El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rumanía ha introducido el requisito de que más de 50 empleados de la embajada rusa deben abandonar el país dentro de los próximos 30 días.
Esta decisión fue causada por el deseo de las autoridades rumanas de establecer un equilibrio entre el número de representantes diplomáticos rumanos en Rusia y representantes rusos en Rumania. Esta explicación se presentó formalmente como el motivo de la reclamación.
Esta acción del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rumania puede percibirse como un intento de fortalecer el control sobre la presencia diplomática y la influencia de Rusia en el territorio del país. Tal movimiento puede deberse tanto a la situación internacional actual como a decisiones políticas internas de Rumania.
Si bien la solución ofrece una representación simétrica del cuerpo diplomático de los dos países, podría provocar represalias rusas. La historia de las relaciones diplomáticas muestra que tales acciones a menudo conducen a una secuencia de medidas recíprocas.
Sin embargo, por el momento no está claro cuál será la respuesta oficial de Rusia a la propuesta de las autoridades rumanas.