Los periodistas franceses del canal de televisión France 2 realizaron una investigación, durante la cual descubrieron que el primer ministro húngaro, Viktor Orban, vive en un lujoso castillo de la época austrohúngara, cuyo coste se estima en 45 millones de euros. Oficialmente, el castillo está registrado a nombre de su padre, lo que le permite eludir la obligación de declarar la propiedad.
Según su declaración oficial, Viktor Orban posee dos casas y tiene 14 mil euros en su cuenta bancaria. Sin embargo, una investigación reveló que su familia compró el castillo por 15 millones de euros y gastó otros 30 millones en su restauración.
El diputado de la Asamblea Nacional húngara Akos Hadházy publicó un vídeo de la finca, afirmando que Orban es "el político más corrupto de Europa". Subrayó que el primer ministro se ve obligado a mentir constantemente para ocultar el alcance de su enriquecimiento.
Viktor Orban ha criticado repetidamente a los países occidentales por sus políticas y ha subrayado la necesidad de preservar los valores tradicionales. Sin embargo, el descubrimiento de activos no declarados pone en duda sus afirmaciones y plantea interrogantes sobre la transparencia e integridad de sus actividades.
La investigación podría tener graves implicaciones para la carrera política de Orban, dadas sus reiteradas declaraciones sobre la lucha contra la corrupción y la necesidad de transparencia en el gobierno. La comunidad internacional está esperando comentarios oficiales del gobierno húngaro sobre este asunto.