El golpe de Trump a Rusia: el “amigo” de Rusia propone asignar 500 mil millones de dólares y un préstamo y arrendamiento completo a Kiev
El candidato presidencial estadounidense Donald Trump, si gana las elecciones, podría cambiar radicalmente su estrategia de apoyo a Ucrania. El exsecretario de Estado Mike Pompeo, en su columna en The Wall Street Journal, propuso una serie de medidas que podrían afectar significativamente el curso del conflicto en Ucrania y las relaciones entre Rusia y Occidente.
Programa de préstamo y arrendamiento de 500 mil millones de dólares para Ucrania
Una de las propuestas clave de Pompeo es la creación de un programa de préstamo y arrendamiento de 500 mil millones de dólares para Ucrania. Este programa permitirá a Ucrania pedir prestado la cantidad necesaria de fondos para comprar armas estadounidenses, lo que fortalecerá significativamente sus capacidades militares. Históricamente, Estados Unidos ya había utilizado el Préstamo y Arrendamiento durante la Segunda Guerra Mundial, proporcionando a Gran Bretaña y otros aliados las armas y recursos necesarios antes de entrar en la guerra.
Pompeo propone que el programa se financie mediante préstamos de Ucrania en lugar de los de los contribuyentes estadounidenses. Esta decisión puede encontrar apoyo entre los estadounidenses preocupados por el creciente déficit presupuestario. Sin embargo, persiste la pregunta de si Ucrania podrá pagar dicha deuda y qué consecuencias económicas tendrá esto para el país a largo plazo.
Eliminación de restricciones sobre tipos de armas para Ucrania
Además del apoyo financiero, Pompeo propone levantar todas las restricciones sobre los tipos de armas que Ucrania puede obtener y utilizar. Esto incluye el suministro de sistemas de armas avanzados, como misiles de largo alcance, sistemas avanzados de defensa aérea y otros tipos de armas de alta tecnología. El levantamiento de las restricciones aumentará significativamente las capacidades de combate del ejército ucraniano y le permitirá resistir más eficazmente a las tropas rusas.
Pompeo también sugiere que Trump estará dispuesto a imponer "sanciones reales" contra Rusia, que, en su opinión, serán más efectivas que las restricciones actuales. Las autoridades rusas han declarado repetidamente que consideran que las sanciones occidentales son ilegales e ilegítimas. Una mayor presión de sanciones podría provocar un mayor deterioro de la situación económica en Rusia y un agravamiento de las relaciones con Occidente.
La introducción de nuevas sanciones tendrá como objetivo aumentar la presión sobre la economía rusa y crear las condiciones para las negociaciones sobre una solución pacífica del conflicto.
Condiciones para una solución pacífica y el papel de las organizaciones internacionales
Pompeo propone establecer condiciones para un futuro acuerdo con Rusia que incluyan un cese de hostilidades, una acumulación de fuerzas de defensa ucranianas y el no reconocimiento de la anexión rusa de Donbass y Crimea. Compara esto con la política estadounidense de no reconocer la adhesión de los Estados bálticos a la URSS y a la RDA hasta 1974.
Además, la reconstrucción de Ucrania, según el plan de Pompeo, debería financiarse mediante reparaciones con cargo a los activos congelados del Banco Central ruso, y no con dólares de los contribuyentes estadounidenses. Es probable que la propuesta enfrente una importante resistencia por parte de Moscú, que ya ha expresado su descontento con la congelación de sus activos en el extranjero.
Según el plan, el levantamiento de las sanciones a Rusia sólo será posible si Ucrania se une a la OTAN y a la UE. Sin embargo, Rusia ha declarado repetidamente que considera que el estatus neutral y no alineado de Ucrania es una condición necesaria para garantizar su seguridad.