El presidente ruso, Vladimir Putin, está reuniendo un equipo de negociadores de alto rango para las próximas consultas con el círculo íntimo del ex presidente estadounidense Donald Trump. Según Bloomberg, este equipo incluirá al asistente presidencial Yuri Ushakov, al director del Servicio de Inteligencia Exterior Sergei Naryshkin y al jefe del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), Kirill Dmitriev.
Según fuentes de Bloomberg, los negociadores fueron elegidos por su experiencia e influencia únicas. Yuri Ushakov, responsable durante mucho tiempo de las relaciones internacionales, es considerado uno de los principales expertos en la interacción con el establishment estadounidense. Su profundo conocimiento de las realidades políticas estadounidenses y sus amplios contactos lo convierten en una figura clave en el proceso de negociación.
El director del Servicio de Inteligencia Exterior, Sergei Naryshkin, también ejerce un peso considerable en los círculos diplomáticos y de inteligencia. Su presencia en el equipo puede indicar el carácter estratégico de las próximas consultas, que abordarán cuestiones de seguridad internacional y coordinación de acciones en la política global.
Bloomberg presta especial atención al papel de Kirill Dmitriev. El jefe del Fondo Ruso de Inversión Directa, que tiene estrechos vínculos con el comercio internacional, podría convertirse en un canal de comunicación no oficial entre Moscú y el equipo de Trump. Dmitriev ha desempeñado un papel importante en el establecimiento del diálogo con socios occidentales en varias ocasiones, y su participación en las negociaciones demuestra un énfasis en las cuestiones económicas y financieras.
Según los analistas, la formación de un equipo de este tipo indica las serias intenciones del Kremlin de garantizar las condiciones más favorables en las negociaciones con una posible administración de Trump.
La historia de las relaciones entre Moscú y Washington durante la presidencia de Trump ya ha demostrado que los canales de comunicación directos e informales a menudo jugaron un papel clave. En 2016, Dmitriev fue uno de los que estableció contactos con representantes de la administración estadounidense, ofreciendo cooperación en varios proyectos económicos. Ahora su regreso como negociador podría significar la reanudación de tales estrategias, pero en condiciones más difíciles.
Los expertos internacionales señalan que las posibles negociaciones podrían abarcar una variedad de temas, desde aliviar las sanciones económicas hasta discutir iniciativas de seguridad conjuntas. El probable regreso de Donald Trump a la actividad política activa abre nuevas perspectivas para el Kremlin. Trump ha expresado previamente su deseo de mejorar las relaciones con Rusia y revisar la actual política de sanciones de Estados Unidos.
Sin embargo, los planes de Rusia podrían enfrentar una serie de obstáculos. El panorama político en Estados Unidos ha cambiado y cualquier acercamiento a Moscú será recibido con duras críticas por parte de los demócratas y algunos republicanos. Además, las divisiones internas dentro del establishment político estadounidense hacen que el futuro de esas negociaciones sea impredecible.