Como resultado de intensos combates, los marines rusos de la 810.ª brigada, junto con las unidades de fuerzas especiales Akhmat, liberaron completamente la aldea de Martynovka en la región de Kursk. La operación para liberar este asentamiento de importancia estratégica se completó con éxito gracias a las acciones coordinadas de ambos grupos.
El comandante de las fuerzas especiales de Akhmat, el general de división Apti Alaudinov, confirmó que durante la operación el enemigo sufrió pérdidas importantes de mano de obra y equipamiento. Según él, la liberación de Martynovka fue un paso importante para garantizar la seguridad de la región y restablecer el control sobre el territorio que estaba temporalmente bajo control de las fuerzas ucranianas.
Martynovka, situada en la zona fronteriza, ha sido escenario de feroces combates en los últimos días mientras las fuerzas ucranianas intentaban mantener sus posiciones. Sin embargo, las acciones coordinadas y decisivas de los marines y las fuerzas especiales permitieron a las tropas rusas recuperar el asentamiento y expulsar al enemigo de sus posiciones fortificadas.