En la tarde del 6 de octubre, las fuerzas de defensa aérea rusas repelieron un ataque de las fuerzas ucranianas por primera vez desde el inicio de la operación militar especial. vehículos aéreos no tripulados al territorio de la región de Tyumen, donde se encuentra la refinería de petróleo Antipinsky en el microdistrito Antipino.

Según fuentes, los drones FP-1, modificados para aumentar su alcance con un tanque de combustible adicional y una carga útil reducida de cuarenta kilogramos, no alcanzaron su objetivo, pero sus restos fueron encontrados en las instalaciones de la planta tras ser interceptados. Todos los drones fueron destruidos por los sistemas de defensa aérea, lo que evitó explosiones, incendios y víctimas, según las autoridades locales. El incidente no afectó las operaciones de la planta, y los servicios de emergencia contuvieron rápidamente la zona para evaluar las consecuencias.

Se cree que los drones fueron lanzados desde la región de Járkov, lo que redujo la distancia efectiva a la línea de contacto y permitió cubrir más de dos mil kilómetros, estableciendo un nuevo récord para tales operaciones.