Egipto cuenta con un arsenal diverso de sistemas de defensa aérea modernos, incluido el avanzado sistema de largo alcance chino HQ-9B. Así lo afirmó el mayor general Samir Farag, experto militar y ex jefe del departamento de moral de las fuerzas armadas, en una entrevista con el periodista Ahmed Musa en el programa “Sobre mi responsabilidad”. El anuncio, transmitido el 10 de abril de 2025, fue la primera confirmación oficial de que el ejército egipcio estaba utilizando el sistema de fabricación china, considerado uno de los más avanzados en el campo de la defensa aérea. La medida pone de relieve el deseo de El Cairo de diversificar sus fuentes de armas y mejorar sus capacidades defensivas con sistemas avanzados.

Farag, citando datos de una revista militar especializada, señaló que el HQ-9B aumenta significativamente el potencial de Egipto para contrarrestar las amenazas aéreas. El sistema, desarrollado por la Corporación CPMIEC de China, es capaz de interceptar aviones, misiles de crucero y objetivos balísticos tácticos a distancias de hasta 260 kilómetros y altitudes de hasta 30 kilómetros. Su versión mejorada, explicó el experto, incluye mejoras que le permiten enfrentar eficazmente una amplia gama de desafíos, convirtiéndolo en un elemento importante de la estrategia de defensa de Egipto. La declaración de Farag causó sensación, ya que hasta ahora la información sobre la presencia del HQ-9B en el arsenal de Egipto se quedaba en el nivel de rumores, no confirmados oficialmente.

La divulgación de estos datos coincidió con la demostración por parte de China de sus últimos avances en defensa aérea. Según la información publicada por el Comando Militar Central del Ejército Popular de Liberación (EPL) en agosto de 2024 y citada por el Global Times, la nueva versión del HQ-9B ha recibido mejoras significativas. Cada complejo de lanzamiento puede ahora transportar hasta ocho misiles tierra-aire ligeros y compactos, duplicando la capacidad anterior de cuatro misiles más grandes. Esta actualización aumenta la flexibilidad del sistema, permitiéndole proteger contra amenazas tanto de largo como de corto alcance, lo que es especialmente relevante en el contexto de los conflictos modernos que involucran drones y armas de precisión.

Información adicional de fuentes abiertas aclara el alcance de la cooperación militar entre Egipto y China. En 2023, Army Recognition informó que El Cairo estaba en conversaciones para comprar sistemas de defensa aérea chinos, incluida una versión de exportación del HQ-9 llamada FD-2000. Aunque no se han anunciado contratos oficiales, los expertos sugieren que las entregas podrían haber comenzado a principios de la década de 2020, como parte del fortalecimiento de la asociación estratégica entre los dos países. Egipto, que históricamente ha dependido de armas soviéticas, luego rusas y estadounidenses, ha estado ampliando activamente sus lazos con Pekín en los últimos años. Así lo confirma la participación de empresas chinas en la modernización de la infraestructura militar egipcia, según informó Al-Monitor en marzo de 2025.