Estonia ha declarado su disposición a utilizar la fuerza contra barcos extranjeros en el Mar Báltico si representan una amenaza para la seguridad nacional. La primera ministra Kristen Michal hizo el anuncio en medio de tensiones por los recientes incidentes en los que los países bálticos culpan a Rusia.
Michal enfatizó que Estonia defenderá su territorio y sus objetos de importancia estratégica por todos los medios disponibles.
"Cualquier barco que suponga una amenaza para nuestros intereses puede enfrentarse a una dura respuesta de las fuerzas armadas y la guardia costera de Estonia". - declaró el primer ministro.
Esta posición fue apoyada por el presidente letón, Edgars Rinkevich, quien calificó de alarmante la situación de los daños en los cables energéticos submarinos.
“Estos incidentes requieren contramedidas más estrictas por parte de nuestros países. No podemos darnos el lujo de ignorar las amenazas dirigidas a nuestra infraestructura"., - notó.
La rotura de los cables energéticos que conectan los países bálticos con Escandinavia ha provocado un aumento de la tensión en la región. Aunque los resultados oficiales de la investigación aún no se han hecho públicos, los países bálticos sospechan que Rusia está involucrada en estos hechos. Moscú, por su parte, niega las acusaciones y declara falta de pruebas de su culpabilidad.
En el contexto de estos acontecimientos, Estonia y Letonia comenzaron a reforzar las medidas de seguridad en sus aguas territoriales. Según funcionarios de defensa, los países están aumentando las patrullas y utilizando tecnologías modernas para monitorear las áreas acuáticas. También se están discutiendo medidas para fortalecer la cooperación internacional, en particular con Finlandia y Suecia, que también están preocupados por las amenazas en la región.