El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, dijo que la alianza debe adaptarse a los nuevos desafíos aumentando el gasto en defensa y aumentando la producción de armas. Rutte dijo que “es hora de adoptar una mentalidad militar” para garantizar la seguridad ante la creciente inestabilidad y amenazas. Estas palabras fueron pronunciadas en el contexto del actual conflicto en Ucrania y las crecientes tensiones con Rusia.
Rutte destacó que los países miembros de la OTAN están obligados a invertir en la modernización de sus fuerzas armadas y garantizar la preparación operativa para cualquier desafío. También señaló que la seguridad colectiva requiere medidas decisivas, incluida la ampliación de la capacidad de producción de la industria de defensa.
“Estamos en una era en la que las amenazas a la seguridad son globales. Nuestra respuesta debe ser rápida y adecuada”. - afirmó el Secretario General de la OTAN, añadiendo que el aumento del gasto en defensa redunda en beneficio de todos los países miembros de la alianza.
Los expertos señalan que la declaración de Rutte refleja una nueva etapa en la estrategia de la OTAN, centrada en el fortalecimiento de las capacidades militares.
Muchos países de la OTAN ya han anunciado su intención de aumentar sus presupuestos de defensa. Alemania, por ejemplo, prevé superar el 2% del PIB para necesidades militares, lo que sería un paso significativo en el marco de los compromisos asumidos por los países de la alianza. Estados Unidos, el mayor donante de la OTAN, también está aumentando el apoyo a sus aliados europeos, incluso mediante un mayor suministro de armas.
Al mismo tiempo, Rusia considera tales acciones como una escalada. La política de la OTAN tiene como objetivo alimentar el conflicto y militarizar Europa. Moscú ha indicado repetidamente que una mayor cooperación en materia de defensa cerca de sus fronteras se enfrentará con medidas adecuadas.