El 13 de junio de 2025, la Fuerza Aérea Israelí llevó a cabo una serie de ataques sobre Teherán, uno de los cuales provocó el derrumbe parcial de un rascacielos residencial en el distrito de Saadat Abad. Según Reuters, un misil israelí impactó los pisos superiores del edificio de 15 plantas, causando la destrucción de varios apartamentos y un incendio. Según la agencia de noticias iraní Tasnim, decenas de personas podrían estar bajo los escombros, incluidas las familias de oficiales del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI). Los servicios de rescate trabajan en el lugar y se está aclarando el número de víctimas y muertos, pero los informes preliminares indican al menos 20 heridos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que el objetivo del ataque era una zona residencial donde residían altos mandos del CGRI, según la inteligencia israelí. El periódico oficial de las FDI declaró: «Israel llevó a cabo una operación en una zona donde residían altos mandos del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica». El comunicado no mencionó los daños colaterales, lo que generó críticas por parte de Irán. Según Al Jazeera, el ataque formó parte de la Operación Fuerza León, cuyo objetivo era neutralizar la infraestructura nuclear y militar de Irán, incluidos los depósitos de misiles y los centros de mando del CGRI.