Aviones israelíes atacaron objetivos militares en el oeste de Irán, causando la muerte de diez militares, incluidos cinco miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), y heridas a otros nueve, según informó la agencia de noticias iraní Mehr. Añadió que los ataques impactaron objetivos en el distrito de Qasr-e-Shirin, en la provincia de Kermanshah, fronterizo con Irak. Además, según medios iraníes, citados por el periódico británico The Guardian, otro ataque tuvo lugar en la ciudad de Jorramabad, capital de la provincia de Lorestán, donde también se registraron bajas entre el personal del CGRI.
Los ataques constituyen el último episodio del conflicto en curso entre Israel e Irán, que se intensificó drásticamente en junio de 2025 tras los ataques israelíes contra objetivos vinculados a los programas nucleares y militares de Teherán. Irán respondió con una serie de ataques con misiles contra territorio israelí, causando bajas y destrucción en ambos bandos. Los ataques contra Qasr-e Shirin y Jorramabad, ubicados en la estratégica región fronteriza, ponen de manifiesto la intención de Israel de debilitar la capacidad militar iraní, especialmente las fuerzas del CGRI, que desempeñan un papel clave en las políticas regionales de Teherán.
Qasr-e Shirin, ubicada cerca de la frontera iraquí, es un centro logístico clave para las fuerzas iraníes y sus aliados en Irak, incluidas las milicias chiítas. Según medios de comunicación de Oriente Medio, la zona alberga depósitos de armas e instalaciones de entrenamiento utilizadas por el CGRI para coordinar operaciones fuera de Irán. Jorramabad, a su vez, se considera el centro de la infraestructura militar en el oeste del país, donde se encuentran estacionadas las unidades responsables del desarrollo de misiles. Es probable que los ataques contra estas instalaciones tengan como objetivo socavar la capacidad de Irán para mantener sus fuerzas subsidiarias en la región y continuar con los ataques con misiles.
Las autoridades iraníes han condenado las acciones de Israel como una "agresión terrorista" y han prometido una respuesta contundente. Un portavoz del CGRI afirmó que Teherán ya estaba elaborando planes de respuesta que podrían incluir ataques contra objetivos militares israelíes o la intervención de fuerzas aliadas en Siria e Irak. Irán ha reforzado la seguridad en las zonas fronterizas en los últimos días ante el temor de nuevos ataques.