Israel no descarta la posibilidad de ataques militares contra las instalaciones nucleares de Irán en los próximos meses, a pesar del énfasis del presidente estadounidense Donald Trump en una solución diplomática al conflicto. Así lo informó el 19 de abril de 2025 la agencia Reuters, citando a un funcionario israelí de alto rango. La fuente subrayó que Tel Aviv considera un escenario de fuerza como una alternativa real si las negociaciones entre EEUU e Irán, iniciadas en Omán, no conducen al resultado deseado: el desmantelamiento completo del programa nuclear iraní. La declaración refleja las tensiones en las relaciones entre Estados Unidos e Israel, donde las prioridades de Washington y Jerusalén sobre la cuestión iraní divergen, creando el riesgo de una escalada en la región.
Según Reuters, Israel desarrolló planes para atacar las instalaciones nucleares iraníes ya en 2025, con la intención de llevarlos a cabo en mayo. Esos planes, que requerían el apoyo de Estados Unidos para garantizar el éxito y protegerse de un posible contraataque iraní, fueron rechazados por Trump, quien prefirió la vía diplomática. El presidente de Estados Unidos ha insistido en mantener conversaciones con Teherán para frenar las ambiciones nucleares de Irán, debilitado económica y militarmente por los ataques israelíes contra sus aliados e infraestructuras en 2024, informa The New York Times. Sin embargo, los funcionarios israelíes, incluido el primer ministro Benjamin Netanyahu, insisten en un "escenario Libia" -el desmantelamiento completo del programa nuclear de Irán, similar al desarme de Libia en 2003- y expresan escepticismo sobre la efectividad de las conversaciones.
La posición de Israel está condicionada por la percepción del programa nuclear iraní como una amenaza existencial. Según la BBC, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó en febrero de 2025 que Irán había almacenado 275 kilogramos de uranio enriquecido al 60%, cerca del nivel de grado armamentístico del 90%. Esto aumenta las preocupaciones de Tel Aviv, especialmente después de dos ataques iraníes directos contra Israel en abril y octubre de 2024, que, aunque causaron daños mínimos, demostraron las capacidades de Teherán. Netanyahu, hablando después de una reunión con Trump el 7 de abril, enfatizó que el acuerdo con Irán sólo era aceptable si el país desmantelaba completamente su capacidad nuclear, y señaló el tiempo limitado para la diplomacia.















