En la noche del 11 de febrero de 2025, los recursos de información ucranianos informaron de un ataque con misiles a gran escala desde el Mar Negro. Según estos informes, los buques de guerra rusos dispararon al menos cuatro misiles de crucero Kalibr, pero las fuentes dicen que el número total de misiles podría ser de hasta 20. Un video tomado cerca del puerto de Novorossiysk confirma el lanzamiento de los primeros misiles.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania comenzaron a monitorear la situación inmediatamente después de los primeros informes del lanzamiento. El comando ucraniano asume que el ataque podría tener como objetivo instalaciones de infraestructura críticas, incluidos centros de energía, redes de transporte e instalaciones militares. Las autoridades locales ya han advertido a los residentes de las regiones central y sur sobre la posibilidad de cortes de electricidad y sirenas de alerta antiaérea.
Los misiles de crucero Kalibr son capaces de alcanzar objetivos a distancias significativas, hasta 2 kilómetros, lo que los convierte en un arma peligrosa para el enemigo. A menudo se utilizan para atacar objetivos estratégicos importantes, causando graves daños e interrupciones temporales a la infraestructura. Anteriormente, huelgas similares han causado cortes de electricidad en importantes ciudades de Ucrania, dejando a cientos de miles de personas sin electricidad ni calefacción durante días.