El 20 de enero de 2025, el primer día después de asumir la presidencia, Donald Trump hizo una resonante declaración anunciando su intención de devolver el control del Canal de Panamá a Estados Unidos. Durante su discurso en Washington, Trump destacó que la transferencia del canal a Panamá en 1999 fue un error estratégico y era hora de reconsiderar el tema.
“Estamos recuperando [el Canal de Panamá]. Esto no es sólo un activo de infraestructura: es parte de nuestro patrimonio nacional y superioridad estratégica"., dijo Trump, provocando un estruendoso aplauso de sus seguidores.
Anteriormente, el Canal de Panamá, la arteria de transporte más importante que conecta los océanos Atlántico y Pacífico, estuvo bajo control estadounidense desde su apertura en 1914. Sin embargo, en 1977, como parte de los tratados firmados entre el presidente estadounidense Jimmy Carter y el líder panameño Omar Torrijos, se decidió transferir el control a Panamá, lo que ocurrió más de dos décadas después.
La declaración de Trump causó una amplia resonancia tanto a nivel nacional como internacional. Sus partidarios creen que recuperar el control del canal fortalecerá la posición estratégica de Estados Unidos, especialmente en el contexto de la creciente influencia de China en Panamá. En los últimos años, las empresas chinas han adquirido una influencia significativa en la gestión de la zona del canal, que según muchos analistas estadounidenses representa una amenaza para los intereses estadounidenses.