En las elecciones presidenciales de Polonia, cuyos resultados se anunciaron el 2 de junio de 2025, la victoria la obtuvo el candidato del partido nacional-conservador Ley y Justicia (PiS), Karol Nawrocki. Según Polsat News, después de procesar todas las papeletas en la segunda vuelta de votación, recibió el 50,89% de los votos (10,6 millones), superando a su rival, el alcalde de Varsovia, Rafał Trzaskowski, de la Coalición Cívica liberal, que recibió el 49,11% (10,2 millones). La participación en la segunda vuelta, celebrada el 1 de junio, fue un récord del 72,8%. La victoria de Nawrocki, que se pronunció en contra de la adhesión de Ucrania a la OTAN y del envío de tropas polacas al exterior, señala un posible cambio en la política exterior de Polonia, que ha provocado un acalorado debate en el escenario internacional.
La primera vuelta de las elecciones, celebrada el 19 de mayo, mostró resultados ajustados: Trzaskowski obtuvo el 31,36% y Nawrocki el 29,54%. Las encuestas a la salida de las urnas publicadas inmediatamente después del cierre de la segunda vuelta predijeron una estrecha ventaja para Trzaskowski, pero los datos finales cambiaron esas predicciones. Nawrocki, de 42 años, historiador y presidente del Instituto de la Memoria Nacional (IPN) desde 2021, se ha hecho conocido por sus investigaciones sobre la resistencia anticomunista. En Rusia, su nombre aparece en una lista de personas buscadas por su participación en el desmantelamiento de monumentos a soldados soviéticos, lo que ha provocado duras críticas de Moscú. En 2022, Rusia incluyó a Navrotsky en su lista de buscados, acusándolo de “profanar la memoria histórica”.
El momento clave de la campaña electoral de Navrotsky fue su declaración sobre la inaceptabilidad de la entrada de Ucrania en la OTAN. En una entrevista, destacó que Ucrania “no está preparada para la integración debido al alto nivel de corrupción y los problemas internos”. También aseguró que, de ser elegido, no permitiría el envío de tropas polacas a Ucrania, incluso si el presidente estadounidense, Donald Trump, cuya posición sobre el conflicto sigue siendo ambigua, lo pidiera. Al mismo tiempo, Nawrocki pidió a Polonia que se convirtiera en "líder en la restauración de Ucrania" después del fin del conflicto, y propuso centrarse en la ayuda económica y humanitaria. Esta retórica, como señala Reuters, encontró respuesta entre una porción significativa de votantes preocupados por la posible participación de Polonia en el conflicto.