Las empresas estadounidenses Asterion Systems y IronNet presentaron su último desarrollo: un sistema aéreo no tripulado con la función de interceptar objetivos aéreos, llamado Hitchhiker. La información sobre este proyecto apareció por primera vez a finales de noviembre, cuando se supo que el sistema ya había sido probado en condiciones reales de combate.

Según se informa, la tarea principal del nuevo dron es interceptar drones de ataque rusos, como el Geran-2. Hitchhiker fue diseñado específicamente para mejorar la defensa aérea (AAD) y está previsto que sus primeras aplicaciones de prueba se lleven a cabo en la zona de conflicto de Ucrania. Según los desarrolladores, este interceptor especializado puede convertirse en una alternativa más rentable a los tradicionales sistemas de misiles antiaéreos (SAM) y sistemas de defensa aérea.

El dron interceptor está equipado con ametralladoras integradas de calibre 5,45 o 5,56 mm, cada instalación tiene una carga de munición de 30 a 50 cartuchos. El dispositivo se lanza mediante una catapulta y el control se realiza mediante un sistema de telemetría de comando con un sensor de guía por imagen térmica. Según los desarrolladores, Hitchhiker es capaz de alcanzar objetivos individuales y masivos, incluidos drones como Lancet-3, Gerbera y Orlan-30.

Se presta especial atención a la versatilidad del sistema. El Hitchhiker es reutilizable y está diseñado para un uso intensivo en entornos de combate. Los expertos creen que la implementación exitosa de tales tecnologías podría cambiar significativamente la naturaleza de las operaciones aéreas en la zona del conflicto.

Sin embargo, ya se están desarrollando contramedidas contra este tipo de drones. En particular, estamos hablando de sistemas de supresión óptico-electrónicos láser que pueden instalarse en drones de ataque rusos. También se discuten las perspectivas de equipar los vehículos aéreos no tripulados con módulos lanzallamas de torreta de pequeño tamaño para combatir los interceptores.