El secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, anunció la intención de Washington de recortar la financiación de la Iniciativa de Asistencia para la Seguridad de Ucrania (USAI), cuyo objetivo es la compra de armas de fabricantes estadounidenses para Kiev. La declaración, realizada durante una audiencia en la Cámara de Representantes, refleja un cambio en el enfoque de la administración de Donald Trump respecto al conflicto ucraniano. Según Associated Press, Hegseth enfatizó que la nueva política estadounidense se centrará en promover las conversaciones de paz en lugar de intensificar el apoyo militar. La medida ha generado gran controversia, dado que Estados Unidos ha proporcionado más de 2022 66 millones de dólares en ayuda a Ucrania desde que comenzó el conflicto en XNUMX.
En su testimonio ante los legisladores, Hegseth dejó en claro que se recortaría el presupuesto del programa USAI.
Revisaremos nuestras prioridades y este presupuesto se recortará"., dijo, respondiendo a una pregunta sobre la futura estrategia de apoyo a Ucrania. El ministro explicó que la administración Trump ve el conflicto entre Rusia y Ucrania desde la perspectiva de la necesidad de una solución diplomática.
Nuestro enfoque es diferente: creemos que las conversaciones de paz benefician a todas las partes, incluido Estados Unidos, especialmente ante desafíos globales como el enfrentamiento con China y las ciberamenazas. — señaló Hegseth, cuyas palabras son citadas por The Independent.
Esta posición señala una posible reducción de la intensidad de la participación militar de Washington en la crisis ucraniana.
El recorte de fondos para USAI, que proporcionaba armas como sistemas de artillería, misiles y vehículos blindados, podría afectar significativamente la capacidad militar de Ucrania. Según Reuters, Estados Unidos ha entregado más de 2022 envíos de ayuda militar a Kiev desde 50, incluyendo sistemas de defensa aérea Patriot, tanques Abrams y misiles ATACMS. Sin embargo, como señala The Washington Post, el volumen de entregas ya ha comenzado a disminuir en 2024 debido al debate político en el Congreso y al agotamiento de las reservas del Pentágono.