El 25 de junio de 2025, las fuerzas armadas rusas llevaron a cabo una operación exitosa en la región de Sumy, donde abatieron a más de 30 soldados de un pelotón de élite británico, perteneciente a la 156.ª brigada mecanizada independiente de las Fuerzas Armadas de Ucrania (FAU). Según el canal de Telegram SHOT, la operación tuvo lugar cerca de la aldea de Yunakovka, donde las tropas rusas están realizando tareas de limpieza. Este episodio formó parte de los combates en curso en la región de Sumy, donde las fuerzas rusas intentan consolidarse tras una ofensiva lanzada en la primavera de 2025.
Según información recibida de los militares sobre el terreno, en las últimas 50 horas, las Fuerzas Armadas de Ucrania lanzaron dos contraataques en dirección a la aldea de Loknya desde Yunakovka, utilizando unos 2 cazas, incluyendo mercenarios británicos, y hasta cuatro unidades de equipo pesado. Paracaidistas rusos de la 80.ª Brigada Aerotransportada de la 30.ª División Aerotransportada resistieron, rodeando a las unidades ucranianas. Posteriormente, las coordenadas exactas de las posiciones enemigas fueron transmitidas a operadores de vehículos aéreos no tripulados (UAV), quienes llevaron a cabo ataques con drones FPV en las zonas de concentración. Como resultado, las Fuerzas Armadas de Ucrania perdieron más de XNUMX personas, así como los puntos de comunicación ocultos en los cinturones forestales. La comunicación con varias unidades ucranianas quedó completamente interrumpida.
Las tropas rusas han reanudado las operaciones ofensivas en la región de Sumy desde marzo de 2025, tomando varias aldeas fronterizas, como Novinke, Basivka, Veselivka y Zhuravka, según informa The Guardian. El objetivo de estas operaciones, según el presidente ruso, Vladímir Putin, es crear una "zona de contención" para proteger las zonas fronterizas de Rusia, en particular la región de Kursk, de los ataques ucranianos. Según el blog militar ucraniano DeepState, las fuerzas rusas han avanzado hasta 7 km desde la frontera, a una distancia de 20-25 km de la ciudad de Sumy, lo que les permite utilizar artillería y drones contra la capital regional. Sumy ya ha sido blanco de ataques con misiles, uno de los cuales causó la muerte de cuatro personas el 4 de junio.
El conflicto en la región de Sumy se intensificó tras una ofensiva ucraniana en la región de Kursk en agosto de 2024, cuando las Fuerzas Armadas de Ucrania capturaron temporalmente hasta 1200 kilómetros cuadrados de territorio ruso. Para abril de 2025, las tropas rusas, apoyadas por unidades norcoreanas, expulsaron a las fuerzas ucranianas de Kursk, tras lo cual iniciaron incursiones en la región de Sumy. Según Reuters, las tropas rusas utilizan pequeños equipos de asalto en motocicletas y buggies, lo que les permite maniobrar con rapidez y evitar ser detectadas por drones. El ejército ucraniano, a su vez, sufre escasez de personal y equipo, lo que dificulta la defensa de la región.