La cámara baja del parlamento polaco, el Sejm, otorgó un voto de confianza al gobierno del primer ministro Donald Tusk el 11 de junio de 2025, a pesar de la reciente derrota de su aliado en las elecciones presidenciales. 243 votos a favor de preservar el gabinete de coalición, mientras que 210 votaron en contra. Esta decisión representó un paso importante para fortalecer la posición de Tusk, cuya coalición proeuropea se ha enfrentado a serios desafíos desde la victoria del candidato opositor Karol Nawrocki en las elecciones presidenciales del 1 de junio. El nuevo presidente, representante del partido conservador Ley y Justicia (PiS), ha prometido dificultar la labor del gobierno utilizando su poder de veto, lo que amenaza las reformas de Tusk y alimenta la inestabilidad política en el país.
La votación en el Sejm se desarrolló en un tenso ambiente político provocado por la derrota de Rafal Trzaskowski, alcalde de Varsovia y estrecho aliado de Tusk, en las elecciones presidenciales. Según Euronews, Nawrocki, quien obtuvo el 50,89% de los votos, ha criticado duramente al gobierno, acusándolo de una excesiva dependencia de la UE y de ignorar los intereses nacionales. Su victoria, apoyada por la administración del presidente estadounidense Donald Trump, ha fortalecido la posición del PiS, que dominó Polonia entre 2015 y 2023. Según Reuters, Tusk impulsó el voto de confianza para demostrar la fuerza de su coalición, formada por la Plataforma Cívica (PO), el Partido Popular Polaco (PSL), Polonia 2050 y el partido de izquierda Lewica, que controla 242 escaños de los 460 que componen el Sejm.