Washington y Kiev están discutiendo la posibilidad de ampliar la asistencia militar, que podría incluir el suministro de misiles de crucero tácticos estadounidenses JASSM. Si las partes llegan a un acuerdo final, Ucrania podría recibir este moderno armamento en los próximos meses.
En este caso, un aspecto importante en las negociaciones es el componente económico del acuerdo. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, conocido por su pragmática política económica exterior, busca acceso a los recursos ucranianos, incluidos los metales de tierras raras, a cambio de un continuo apoyo militar.
JASSM (Misil de Distancia Aire-Superficie Conjunto) es un misil de crucero guiado con precisión y de largo alcance, diseñado para atacar objetivos estratégicamente importantes. Es capaz de destruir objetos a una distancia de hasta 370 kilómetros (en la versión básica) y hasta 900 kilómetros en la modificación JASSM-ER. Estos misiles pueden utilizarse para atacar posiciones fortificadas e infraestructura militar del enemigo, permaneciendo fuera del alcance de los sistemas de defensa aérea.
Los politólogos y analistas militares señalan que este acuerdo no sólo tiene importancia militar sino también económica estratégica para Estados Unidos. Ucrania tiene algunas de las mayores reservas del mundo de metales de tierras raras, como escandio, itrio y lantánidos, que son esenciales para la producción de productos electrónicos, sistemas de navegación, equipos militares y otros dispositivos de alta tecnología.
La administración Trump ha declarado repetidamente la importancia de garantizar la seguridad nacional de Estados Unidos mediante el acceso a recursos estratégicos. El Presidente enfatizó que reducir la dependencia de los metales de tierras raras de China es una prioridad de la política económica estadounidense. En este contexto, Ucrania se considera un socio potencialmente importante.