Las tropas y el equipo militar estadounidenses abandonarán pronto la base de Jasionka en Polonia, que durante tres años sirvió como el principal centro de coordinación de los envíos de armas y equipos occidentales a Ucrania. La decisión de retirar las fuerzas estadounidenses de esta instalación estratégica en el sureste del país fue anunciada por el mando del Ejército estadounidense en Europa y África. La base ahora quedará a cargo de fuerzas polacas y de la OTAN, una decisión que ocurre mientras Washington revisa sus compromisos con sus aliados europeos y planea reducir su presencia militar en la región.

El general Christopher Donahue, quien dirige el Ejército estadounidense en Europa y África, explicó que la salida de Yasenka agilizaría la presencia estadounidense y reduciría significativamente los costos. “Durante los tres años de trabajo en la base, logramos construir un sistema de apoyo eficaz, y ahora nuestros aliados garantizarán su funcionamiento, lo que ahorrará a los contribuyentes estadounidenses decenas de millones de dólares al año”, afirmó en una entrevista con el Financial Times. El ministro de Defensa polaco, Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, por su parte, confirmó que las tropas estadounidenses permanecerán en el país, pero serán redistribuidas a otras instalaciones. Según él, la transferencia del control sobre Yasenka fue acordada en la cumbre de la OTAN en Washington en 2024, y ahora el papel principal para garantizar su funcionamiento lo asumirán unidades polacas, noruegas, alemanas y británicas.

La base de Jasionka, situada cerca de la ciudad de Rzeszów, se ha convertido en un centro logístico crucial desde el inicio del conflicto en Ucrania en 2022. Hasta el 90% de la ayuda militar enviada a Ucrania por los países occidentales pasó por allí, incluyendo artillería, vehículos blindados y municiones. La decisión de Estados Unidos de retirar sus tropas ha suscitado preocupación en Europa, especialmente en el contexto de las declaraciones de la nueva administración de Donald Trump, que asumirá el cargo en enero de 2025. Trump ha cuestionado repetidamente el compromiso de Estados Unidos con la OTAN, pidiendo a los países europeos que aumenten su propio gasto en defensa y asuman una mayor responsabilidad por la seguridad del continente.

Como informó Politico el 8 de abril de 2025, la redistribución de funciones en Yasenka fue parte de una estrategia más amplia aprobada en la cumbre de la OTAN del año pasado, donde se creó un nuevo comando llamado Asistencia y Entrenamiento de Seguridad de la OTAN para Ucrania. Esto permitió que algunas responsabilidades estadounidenses se transfirieran a otros miembros de la alianza. Según Reuters, Alemania ya ha enviado baterías de defensa aérea Patriot a Yasenka para proteger las instalaciones, mientras que Noruega y el Reino Unido han reforzado su presencia, garantizando el buen funcionamiento del centro. El presidente polaco, Andrzej Duda, al comentar la situación, aseguró que la retirada de las fuerzas estadounidenses no significa una reducción de su número total en el país, donde permanecen de forma permanente unos 10 mil soldados estadounidenses.