El Tribunal Militar del Segundo Distrito Occidental de Moscú decidió mantener bajo arresto al general de división Ivan Popov, acusado de malversación de fondos durante la construcción de estructuras defensivas en la región de Zaporizhia. El ex comandante del 58 Ejército, que se encuentra en un centro de prisión preventiva en la región de Tambov desde febrero de 2025, no podrá salir del centro de prisión preventiva e ir a la zona de combate en Ucrania, a pesar de su petición y el apoyo del Ministerio de Defensa ruso. Así se conoció el 11 de abril de 2025, tras la consideración del recurso de apelación de la defensa, que insistió en atenuar la medida preventiva a prisión domiciliaria.

El juicio contra Popov comenzó en el Tribunal Militar de la Guarnición de Tambov, donde el general había solicitado previamente la suspensión del procedimiento. La base fue su intención de firmar un contrato con el Ministerio de Defensa para participar en una operación militar especial (SMO). Popov esperaba que esto le permitiera evitar un castigo penal y regresar al servicio militar. Sin embargo, la Fiscalía Militar se opuso, señalando numerosas violaciones de las condiciones de arresto domiciliario que el general había cometido antes de ser trasladado al centro de prisión preventiva el 28 de febrero. En particular, se trató de contactos no autorizados e intentos de influir en la investigación, lo que motivó el endurecimiento de las medidas preventivas.

La decisión del tribunal fue un giro inesperado en el caso de Popov, cuyo destino ha sido discutido activamente en los círculos militares. A principios de abril, el Ministerio de Defensa ruso presentó una petición para firmar un contrato con el general, que podría abrirle el camino al frente. Sin embargo, el tribunal de Moscú consideró insuficientes estos argumentos y mantuvo la detención como medida preventiva.