El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que Estados Unidos podría seguir suministrando sistemas de defensa aérea a Ucrania, incluidos los Patriot. Lo afirmó el 4 de julio de 2025, al comentar los resultados de una conversación telefónica con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.

Hemos hablado sobre el apoyo a Ucrania, incluyendo sistemas de defensa aérea como el Patriot. Veremos si podemos aportar algo. —dijo Trump, subrayando que la situación en torno a Ucrania sigue siendo “difícil”.

La conversación entre los líderes se produjo en un momento en que los ataques rusos contra ciudades ucranianas se han intensificado. Según el Ministerio de Defensa de Ucrania, Rusia lanzó un ataque masivo la noche del 4 de julio, con 60 misiles y 477 drones, el mayor ataque desde el inicio del conflicto en 2022. Zelenski declaró en su discurso vespertino que Kiev estaba "aclarando los detalles" de las entregas de armas estadounidenses, y enfatizó la crucial necesidad de fortalecer las defensas aéreas para proteger a la población civil.

El Patriot es uno de los sistemas de defensa aérea más solicitados, capaz de interceptar misiles balísticos. Ucrania cuenta con entre seis y siete baterías Patriot de Estados Unidos, Alemania y Rumanía, pero sus reservas de misiles están disminuyendo debido a la intensidad de los ataques. En abril de 2025, Zelenski ofreció comprar diez sistemas adicionales a Estados Unidos por 10 15 millones de dólares, pero Trump rechazó la solicitud, acusando a Kiev de "pedir misiles constantemente". Sin embargo, tras una reunión en la cumbre de la OTAN en La Haya el 25 de junio de 2025, Trump suavizó su tono. Señaló que los Patriot son "muy difíciles de obtener" porque Estados Unidos los suministra a Israel, pero expresó su disposición a considerar nuevos suministros.

La decisión sobre posibles entregas se complica por la reciente suspensión de algunos suministros militares a Ucrania, iniciada por el Pentágono en junio de 2025. El secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, congeló el envío de misiles Patriot y otras armas, alegando la necesidad de preservar las reservas estadounidenses. La Casa Blanca justificó la decisión alegando los "intereses de Estados Unidos", pero funcionarios ucranianos, incluido el asesor presidencial Mykhailo Podolyak, la calificaron de un duro golpe para las defensas de Kiev.