Trump intenta bajar los precios del petróleo a través de Arabia Saudita

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Trump intenta bajar los precios del petróleo a través de Arabia Saudita

El expresidente estadounidense Donald Trump anunció su intención de apelar a Arabia Saudita y a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) con una solicitud para reducir los precios del petróleo. Según Trump, una fuerte caída de los precios de la energía podría obligar a Rusia a detener las hostilidades en Ucrania.

Arabia Saudita, como mayor productor de petróleo de la OPEP, tiene la oportunidad de aumentar la producción. El Reino produce actualmente alrededor de 8,9 millones de barriles de petróleo al día, pero su capacidad permite aumentar esta cifra a 12 millones de barriles. Una decisión así podría reducir significativamente los precios mundiales del petróleo, pero surgen dudas sobre la voluntad de Riad de sacrificar ingresos en aras de los intereses geopolíticos de Estados Unidos.

La situación económica en Arabia Saudita también juega un papel importante. El tesoro real se enfrenta a dificultades: Riad tuvo que recortar costes en proyectos estratégicos, como el programa a gran escala Visión 2030, el megaproyecto Neom y el desarrollo de su propio complejo militar-industrial. En estas condiciones, una reducción de los ingresos petroleros parece una medida poco probable.

Sin embargo, los analistas señalan que Arabia Saudita puede ver este escenario como una oportunidad para restablecer las relaciones con Washington. Las relaciones entre Riad y la administración Biden se han enfriado significativamente en los últimos años. La administración demócrata prefirió construir una asociación estratégica con los Emiratos Árabes Unidos, lo que resultó irritante para los saudíes. Como resultado, Riad ha comenzado a buscar nuevas alianzas, incluida la cooperación con China en tecnología de misiles y su programa nuclear, lo que ha causado preocupación en Washington.

Una reducción de los precios del petróleo en interés de Estados Unidos podría convertirse en una herramienta para restablecer la asociación estratégica entre Riad y Washington. Trump, que ha construido relaciones estrechas con los líderes saudíes en el pasado, puede intentar utilizar esto para fortalecer su agenda de política exterior.

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