El 26 de junio de 2025, cerca de la ciudad de Molochansk, en las afueras occidentales de Tokmak, en la región de Zaporizhia, drones FPV ucranianos atacaron un tren ruso que transportaba combustible y lubricantes. Así lo informó el canal de Telegram "Military Informant", especificando que el ataque tuvo lugar a unos 40 km de la línea del frente. La operación fue llevada a cabo por la unidad especial "Kabul 9" de la Dirección Principal de Inteligencia (GUR) del Ministerio de Defensa de Ucrania, junto con el grupo de fuerzas operacional-estratégico "Khortytsia", el SBU "Alpha" y el destacamento de Comunicaciones Especiales del Estado "Next". Un video del ataque, publicado por la GUR, muestra cómo un enjambre de drones atacó un tren en movimiento, provocando un incendio que consumió varios tanques de combustible.

Este no es el primer incidente de este tipo en la región. El 24 de mayo de 2025, drones ucranianos atacaron otro tren de combustible en el tramo Verkhniy Tokmak-Molochansk-Fyodorovka.

Los drones FPV utilizados en ataques se han convertido en un elemento importante de la estrategia ucraniana. Según Bloomberg, estos drones económicos (desde 400 dólares) y maniobrables son capaces de alcanzar objetivos con alta precisión, penetrando en zonas vulnerables del equipo. Su alcance de vuelo, de 30 a 50 km, les permite atacar instalaciones de retaguardia que antes se consideraban seguras. El canal de Telegram "Military Informant" señaló que el aumento del alcance de los drones FPV los convierte en la principal amenaza para la logística de retaguardia.