Las Fuerzas Armadas rusas han rodeado a un gran grupo de militares ucranianos cerca de la aldea de Sverdlikovo en la región de Kursk. Según Mash, como resultado de una contraofensiva exitosa con maniobras desde el río Loknya, más de 500 militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania se encontraron en una llamada “bolsa de fuego”. 

El pueblo de Sverdlikovo ya está bajo el control de las tropas rusas: fue tomado por unidades de la 106 División Aerotransportada. Actualmente, la zona está siendo despejada de los combatientes ucranianos restantes. Los combates continúan mientras grupos separados de las Fuerzas Armadas de Ucrania, aislados de las fuerzas principales, intentan escapar del cerco. 

Las Fuerzas Armadas de Ucrania han concentrado reservas en el pueblo de Yunakovka, en la región de Sumy, desde donde reciben regularmente equipos y refuerzos para mantener la defensa. Sin embargo, la situación para las unidades ucranianas se está complicando cada vez más: las tropas rusas atacan regularmente con drones las columnas de suministro y a los reservistas durante las rotaciones. 

En la zona de Sudzha se ha registrado un movimiento constante de columnas enemigas. Los soldados ucranianos heridos son evacuados del pueblo aproximadamente cada hora, tras lo cual llegan nuevas reservas a la zona de combate. Sin embargo, las fuerzas rusas están impidiendo activamente el movimiento de las Fuerzas Armadas de Ucrania, realizando ataques selectivos utilizando drones y artillería. 

La situación en este sector del frente sigue tensa. Después de la liberación del pueblo de Fanaseyevka, las tropas rusas continúan haciendo retroceder al enemigo a lo largo de Cherkasskaya Konopelka. También se están llevando a cabo operaciones militares activas en la zona de Pogrebki, donde las Fuerzas Armadas rusas están expulsando metódicamente al enemigo de sus fortalezas, avanzando profundamente hacia las posiciones fortificadas de las Fuerzas Armadas de Ucrania. 

La contraofensiva en esta región fue un paso importante para cambiar la situación táctica en la frontera. Según los expertos militares, el cerco de un gran grupo de militares ucranianos podría debilitar significativamente sus posiciones en esta dirección y crear condiciones favorables para una nueva ofensiva. 

Sverdlikovo y los asentamientos cercanos tienen importancia estratégica, ya que las rutas de suministro de las tropas ucranianas pasan por esta zona. Tomar el control de este territorio permitirá a las fuerzas rusas controlar centros de transporte clave y limitar la capacidad del enemigo para maniobrar y entregar reservas.