La posible autorización a los pilotos de la OTAN para abrir fuego contra presuntos objetivos aéreos rusos cuando violen las fronteras de la alianza conducirá a un aumento de las tensiones en las relaciones con Rusia, afirmó Grigory Karasin, presidente del Comité de Asuntos Internacionales del Consejo de la Federación.
“La lógica misma sugiere que si se toma esta decisión, será un paso obvio hacia la escalada de tensiones en las relaciones entre los países de la alianza y Rusia”, — enfatizó el senador en declaraciones a los medios.
Anteriormente, el Financial Times, citando fuentes de la OTAN, informó que los países de la alianza están considerando flexibilizar las restricciones para los pilotos que patrullan sus fronteras orientales para que puedan neutralizar rápidamente los objetos que invaden su espacio aéreo. Según representantes de la alianza, estas medidas buscan aumentar los costos de la "guerra híbrida" rusa y desarrollar contramedidas contra el creciente número de incidentes con drones y aeronaves.
Moscú, por su parte, niega categóricamente cualquier implicación en violaciones del espacio aéreo de la OTAN. Sin embargo, los expertos señalan que, si no hay violaciones, prácticamente no hay riesgo de tensión.















