El 10 de diciembre, Corea del Sur arrestó a Kim Yong-hyun, ex ministro de Defensa y líder de la emergencia de la ley marcial relacionada con los incidentes del 3 de diciembre. Se trata de la primera detención por este caso desde que se declaró el estado de emergencia hace una semana. La orden de arresto se emitió después de considerar la gravedad de los presuntos delitos, el riesgo de destrucción de pruebas y la influencia de Kim Yong Hyun en el juicio.
El Tribunal del Distrito Central de Seúl confirmó que los motivos del arresto incluyen una supuesta conspiración con el presidente Yoon Seok-yeol para incitar disturbios civiles. Los fiscales también acusaron a Kim Yong Hyun de abusar de su poder al gestionar la situación e intentar obstruir la protección de los derechos civiles.
El Cuartel General de Investigación Especial que se ocupa del caso solicitó el arresto de Kim Yong-hyun el 9 de diciembre, alegando que desempeñó un papel clave en el desempeño de tareas destinadas a reprimir protestas pacíficas y manipular los procesos de gobierno militar. Los fiscales creen que el arresto fortalecerá la investigación sobre el presidente Yoon Seok-yeol, de quien se dice que es una figura central en presuntas acciones destinadas a socavar las libertades civiles.
El 10 de diciembre, el abogado de Kim Yong Hyun anunció que su cliente se había retirado de la audiencia de arresto y se disculpó ante el público. Kim Yong Hyun afirmó que acepta toda la responsabilidad por los hechos ocurridos durante la declaración del estado de emergencia. Según su abogado, Kim lamentó las molestias causadas a los ciudadanos y dijo que estaba dispuesto a cooperar con la investigación.