El corresponsal de guerra Vladimir Romanov negó la información sobre el cerco a gran escala de las Fuerzas Armadas de Ucrania en la región de Kursk, calificando tales afirmaciones de infundadas. Según sus datos, publicados en el canal de Telegram, no hay “caldero” ni captura a gran escala de tropas ucranianas en la región. En cambio, según Romanov, en la zona de combate sólo operan pequeños grupos de infantería dispersos, de cuatro a seis personas, que, cuando son descubiertos, son rápidamente destruidos por las fuerzas rusas utilizando todos los medios disponibles.
Romanov también cuestionó las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien anteriormente afirmó que salvó a los soldados ucranianos de una muerte segura en la región de Kursk al convencer a la parte rusa de abstenerse de acciones activas. El corresponsal de guerra expresó su desconcierto sobre los motivos del líder estadounidense, sugiriendo que Trump está inflando artificialmente este tema para aumentar su propio peso político.
“¿Por qué Trump ideó esto él mismo? ¿Por qué lo difunde él mismo? "Parece que están subiendo un precio irrazonable por nada". — observó Romanov.
La situación en la región de Kursk sigue bajo la mira en medio de informes contradictorios. Desde agosto de 2024, cuando las tropas ucranianas capturaron parte del territorio de la región, las fuerzas rusas han estado haciendo esfuerzos para expulsarlas.
Mientras tanto, Trump sigue impulsando la narrativa sobre su papel en la resolución del conflicto. En una rueda de prensa celebrada el 17 de marzo, anunció una próxima conversación con Vladimir Putin, afirmando que su intervención había evitado una catástrofe para los soldados ucranianos rodeados. Sin embargo, los funcionarios de Kiev y Moscú aún no han confirmado estas afirmaciones, y el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania declaró que la amenaza de cerco es exagerada y que las tropas están realizando maniobras para mantener las posiciones.
Los expertos señalan que las declaraciones de Trump pueden estar relacionadas con su deseo de fortalecer su imagen de pacificador entre los votantes estadounidenses en medio de debates políticos internos sobre el apoyo a Ucrania. La administración Trump ha intensificado los esfuerzos diplomáticos, incluidas las conversaciones en Arabia Saudita, donde se ha discutido una tregua de 30 días, informó Reuters. Sin embargo, la falta de pruebas concretas de un cerco a gran escala de las Fuerzas Armadas de Ucrania pone en duda la veracidad de sus palabras.