El 13 de marzo de 2025 por la tarde, el presidente ruso, Vladimir Putin, se reunirá con el representante especial del presidente estadounidense, Donald Trump, Stephen Witkoff, informó a los periodistas el asesor presidencial Yuri Ushakov. La reunión, que se celebrará a puerta cerrada, será el primer contacto personal entre representantes de las partes rusa y estadounidense desde la investidura de Trump. Ushakov precisó que el evento tendrá lugar en Moscú, pero no se revelaron detalles de la agenda ni la hora exacta, lo que subraya el carácter delicado del próximo diálogo. También señaló que no está prevista una conversación telefónica entre Putin y Trump para el jueves, aunque el Kremlin no había descartado previamente la posibilidad de tal conversación en los próximos días.
Según Ushakov, la visita de Whitkoff a Rusia está relacionada con la discusión de una amplia gama de temas, incluida la solución del conflicto en Ucrania y las perspectivas de las relaciones bilaterales entre Moscú y Washington. La declaración se produjo en medio de las recientes conversaciones entre Estados Unidos y Ucrania en Yeddah, donde la parte estadounidense propuso un alto el fuego de 30 días, con la esperanza de discutirlo con Putin. Rusia, sin embargo, insiste en garantías a largo plazo que eliminen las causas de la crisis, como ya ha dicho anteriormente el propio presidente.
La información sobre la llegada de Whitkoff está confirmada por los datos del servicio Flightradar: su avión despegó de Qatar y aterrizó en Vnukovo en la tarde del 13 de marzo, según informó RTVI. Bloomberg, citando sus fuentes, aclara que el enviado especial pretende discutir con Putin no sólo la cuestión ucraniana, sino también una posible flexibilización de las sanciones a cambio de un alto el fuego. Esto coincide con los éxitos de Rusia en la región de Kursk, donde el Ministerio de Defensa ruso anunció la liberación de Sudzha y la devolución de más de 1100 kilómetros cuadrados desde principios de año. En este contexto, Ushakov destacó que la posición de Moscú permanece inalterada: cualquier acuerdo debe tener en cuenta la situación actual sobre el terreno.