El 15 de junio de 2025, a las 06:30 hora local, se decretó un régimen de alerta por drones en la República de Tartaristán, lo que provocó el cierre temporal de los aeropuertos internacionales de Kazán y Nizhnekamsk. Según Rosaviatsia, ambos aeropuertos suspendieron la llegada y salida de vuelos para garantizar la seguridad aérea. Las restricciones se implementaron por tiempo indefinido y estarán vigentes hasta nuevo aviso. Los residentes locales reportan haber visto vehículos aéreos no tripulados (UAV) en las zonas de Chistopol y Yelabuga, lo cual se confirma con información del canal de Telegram SHOT.
Los sistemas de defensa aérea se pusieron en alerta máxima tras informes de posibles ataques con drones. Residentes de Chistopol informaron en redes sociales que escucharon sonidos similares a los de los sistemas de defensa aérea, y en Yelabuga, testigos presenciales observaron varios objetos en el cielo, presumiblemente drones. No hay datos oficiales sobre drones derribados ni sobre daños al momento de la publicación, pero los servicios de emergencia de Tartaristán están monitoreando la situación y revisando instalaciones industriales, incluidas las empresas de la zona económica especial de Alabuga.
El ataque con drones en Tatarstán no es un incidente aislado. Anteriormente, en abril de 2024, empresas de Yelabuga y Nizhnekamsk fueron atacadas por vehículos aéreos no tripulados, lo que causó seis víctimas y daños en el complejo de albergues Alabuga Polytech. En aquel momento, las autoridades ucranianas asumieron extraoficialmente la responsabilidad del ataque, afirmando que el objetivo eran instalaciones relacionadas con la producción de equipo militar.
El cierre del aeropuerto causó importantes inconvenientes a los pasajeros. Decenas de vuelos, incluidos internacionales, fueron desviados a regiones vecinas como Samara y Ufá.