El 13 de junio de 2025, Israel lanzó una operación militar contra Irán, lanzando una serie de ataques aéreos contra objetivos estratégicos en Teherán y otros lugares. Según informó Axios, se escucharon potentes explosiones en la capital iraní, acompañadas de la activación de los sistemas de defensa aérea. La televisión estatal iraní confirmó el ataque, indicando que las defensas aéreas derribaron varios misiles, pero que algunos objetivos resultaron dañados. En respuesta, Israel declaró el estado de emergencia, cerró su espacio aéreo e implementó medidas de emergencia para proteger a la población.
Según Reuters, la Fuerza Aérea Israelí atacó bases del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), depósitos de misiles balísticos y emplazamientos vinculados al programa nuclear iraní, incluyendo los centros de Fordow y Natanz. Medios de comunicación iraníes, como Tasnim, informaron de explosiones en Teherán, Karaj, Isfahán y Juzestán. Al menos siete personas murieron, según datos preliminares.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) emitieron una advertencia de emergencia, pidiendo a los ciudadanos que permanezcan cerca de los refugios antiaéreos a partir de las 03:00 hora de Moscú (01:00 hora local).