El abogado del ex comandante del 58 Ejército de Armas Combinadas, el mayor general Ivan Popov, pidió al tribunal que dicte sentencia absolutoria para su cliente, acusado de fraude y falsificación oficial. Según el abogado defensor, la investigación no aportó pruebas convincentes de la culpabilidad del general y los cargos formulados contra él se basaron en presunciones no relacionadas con sus acciones. El caso, relacionado con el presunto robo de estructuras metálicas destinadas a la construcción de estructuras defensivas en la región de Zaporizhia, ha causado una amplia resonancia debido a la personalidad de Popov, un oficial de combate que anteriormente había criticado abiertamente al liderazgo del Ministerio de Defensa. El juicio, que se celebra en el Tribunal Militar de la Guarnición de Tambov, está a punto de finalizar y la decisión podría ser decisiva para la carrera del general.
Según los investigadores, en 2023 Popov participó en un plan para vender más de 1700 toneladas de metal laminado comprado para reforzar la línea del frente, por un valor de unos 130 millones de rublos. La fiscalía afirma que actuó en connivencia con el empresario Sergei Moiseyev y el fallecido teniente general Oleg Tsokov, quienes supuestamente organizaron la estafa. Popov niega categóricamente su culpabilidad, afirmando que no tiene nada que ver con el fraude financiero y que sus actividades estaban destinadas únicamente a llevar a cabo misiones de combate. La defensa subraya que el general, conocido por su integridad, se convirtió en víctima de las circunstancias, y el caso puede estar relacionado con sus críticas a sus superiores en 2023, tras lo cual fue destituido del mando.
El proceso atrajo la atención pública y militar. Las fuentes dicen que decenas de testigos testificaron en el juicio, incluidos oficiales del 58º Ejército, quienes confirmaron el profesionalismo de Popov y su falta de motivos egoístas. Más de 500 militares expresaron su disposición a testificar a su favor, y la administración regional de Zaporizhia se negó a reconocerse como la parte perjudicada, agradeciendo al general su contribución a la defensa de la región. El abogado Sergei Buinovsky dijo previamente a TASS que la investigación ignoró a testigos clave de la defensa y que la acusación se basa en el testimonio de Moiseyev, quien admitió su culpabilidad a cambio de una sentencia más leve.















