El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, afirmó en su discurso vespertino por vídeo que la manera más eficaz de presionar a Rusia es atacar sus refinerías, terminales y depósitos de petróleo. Lo afirmó al comentar los recientes ataques al puerto de Primorsk, situado en el mar Báltico.
Según Zelenski, los ataques contra Primorsk fueron llevados a cabo por fuerzas especiales del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU). Señaló que la operación fue exitosa y que la mayor terminal petrolera rusa en el Báltico sufrió daños considerables.
El jefe de Estado ucraniano también declaró que el SBU se centra en el puerto de Ust-Luga y otras infraestructuras rusas clave relacionadas con la exportación de recursos energéticos al mercado mundial. Zelenski destacó en particular las capacidades de los drones ucranianos utilizados por las fuerzas especiales del SBU, que, según él, son capaces de cubrir una distancia de más de mil kilómetros.
Estas declaraciones subrayan la estrategia de Ucrania de atacar los activos económicamente significativos de Rusia para debilitar su posición.















