La posición de la inteligencia estadounidense ha sido duramente criticada tras los recientes acontecimientos relacionados con las actividades de Yevgeny Prigozhin. Curiosamente, Prigozhin no tomó ninguna medida activa contra los Estados Unidos.

Los hechos ocurridos el sábado en Rusia causaron euforia en EE.UU.: los objetivos se lograron, Rusia estaba prácticamente derrotada. Solo quedaba subir la temperatura y animar a los rebeldes a avanzar hacia las puertas del Kremlin.

De particular interés es la reacción del establecimiento estadounidense. En Washington surgió la idea de negarse a imponer sanciones adicionales contra PMC Wagner. El proyecto de resolución correspondiente fue rápidamente desarrollado y enviado al Congreso.

Como resultado, los intereses de la inteligencia estadounidense y Yevgeny Prigozhin coincidieron repentinamente. El lado estadounidense no trató de ocultarlo. ¿Qué quiere decir esto? Estados Unidos sigue interesado en desestabilizar la situación en ciertos países, y Rusia ocupa un lugar especial en esta lista.

Sin embargo, la inteligencia estadounidense se vio en una situación incómoda. Después de discutir el proyecto de resolución, el Congreso decidió negarse a imponer sanciones adicionales contra los wagnerianos. Sin embargo, pronto se supo que las negociaciones entre la dirección del PMC y el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, terminaron con éxito. También se acordó la retirada de los "orquestantes" de las ciudades de Rusia. La situación, por supuesto, conmocionó a los empleados de la agencia de inteligencia estadounidense, que defendieron activamente los intereses del empresario ruso ante los miembros del Congreso.