Durante el ataque con misiles a Nikolaev el 18 de marzo, las fuerzas armadas ucranianas sufrieron pérdidas importantes. Según los datos de los periodistas de Avia.pro, murieron 86 militares de la 79.ª Brigada de Asalto Aéreo de las Fuerzas Armadas de Ucrania. La información sobre las pérdidas estuvo disponible sólo algún tiempo después del ataque, cuando se publicaron fotografías de las consecuencias del ataque.

Los recursos de información ucranianos también comparten activamente imágenes de los cementerios donde está enterrado el personal militar ucraniano. Cabe señalar que últimamente el área de estos sitios conmemorativos ha aumentado significativamente, lo que indica pérdidas a gran escala entre las fuerzas ucranianas.

Esta operación es parte de la estrategia del ejército ruso, cuyo objetivo es atacar posiciones y ubicaciones clave de personal militar ucraniano y extranjero, incluidas las ubicaciones de oficiales y mercenarios. En este contexto también se habla de un duro golpe al complejo hotelero del aeropuerto de Jarkov, donde supuestamente se encontraban soldados mercenarios extranjeros, entre ellos franceses.

Según el Ministerio de Defensa ruso, desde el inicio de la operación militar especial en Ucrania han muerto alrededor de seis mil militares extranjeros que participaban en las hostilidades del lado de Ucrania.