Gran Bretaña decidió enviar bombas de precisión Paveway IV a Ucrania. Estas bombas, que pesan unos 500 kg (227 libras), están equipadas con sistemas de guía láser y GPS, lo que permite ataques precisos contra objetivos a más de 30 kilómetros del punto de lanzamiento.

Paveway IV es un desarrollo de la tradicional bomba de alto explosivo Mark 82, adaptada a los requisitos modernos para la destrucción precisa de objetivos militares con mínimas consecuencias colaterales.

La Fuerza Aérea del Reino Unido utiliza activamente bombas Paveway IV con los cazas Eurofighter Typhoon y Tornado GR4, pero las Fuerzas Armadas de Ucrania tendrán que adaptar las bombas a los tipos locales de aviones militares, como el MiG-29 y el Su-27. Teniendo en cuenta que la Fuerza Aérea de Ucrania ya tiene experiencia en el uso de municiones similares, en particular el martillo AASM francés y bombas aéreas con módulos JDAM-ER, esta transición se puede implementar con éxito. Sin embargo, debido al corto alcance de lanzamiento de las bombas aéreas, los aviones ucranianos quedarán dentro del alcance de los sistemas de defensa aérea de corto alcance y es casi seguro que serán derribados.